25 de abril de 1898, Madrid.
¡Madre de Dios bendito! Esto se va a poner como el rosario de la Aurora... ¡Como si no tuviésemos los españoles suficiente ya con la guerra en Cuba, ahora vienen los estadounidenses y nos declaran la guerra! ¿Y esto por qué? Pues porque no nos quieren cerca y quieren quitarnos nuestras posesiones en América. Pues este rechazo, digo yo, se debe al miedo que nos tienen, por eso no nos quieren allí. Todo rechazo se produce, en cierta manera, debido al miedo. Y este miedo se camufla por la aplicación de la doctrina propuesta por Monroe: "América para los americanos". ¡Unas narices! Del mismo modo, podríamos decir nosotros "Europa para los españoles", pero no lo decimos(más que nada porque las demás potencias nos cascarían de lo lindo).
Y yo, de verdad, no sé qué vamos a hacer con Cuba. Mi compañero de gobierno Cánovas y yo coincidimos en que es necesario agotar los recursos económicos y humanos para defender nuestra colonia, pero él piensa que es necesaria antes la paz para realizar reformas, mientras que mi opinión es que las reformas llevadas a cabo conseguirían la paz con los cubanos. En fin, que sea lo que Dios quiera(y si quiere el triunfo español, mejor).
Se avecina la decadencia de España, pero ojalá no me pille vivo. Ante esta situación que nos está tocando vivir, sólo puedo decir: ¡Ay Señor, llévame pronto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario